Sábado Santo: un día de silencio, esperanza y espera por la Resurrección

Sábado Santo: un día de silencio, esperanza y espera por la Resurrección

Por : Luciano Vásquez

El Sábado de Resurrección, también conocido como Sábado Santo, es el día que sigue al Viernes Santo y precede al Domingo de Resurrección en la Semana Santa. Para los cristianos, representa una jornada de profundo silencio, reflexión y recogimiento, ya que se conmemora el tiempo en que el cuerpo de Jesús permaneció en el sepulcro tras su crucifixión.

Este día simboliza:
• El descanso de Jesús en el sepulcro.
• El luto y la esperanza de sus discípulos y seguidores.
• Un tiempo de espera y meditación, a la espera de su gloriosa resurrección.

La celebración del Sábado Santo marca una transición espiritual: del dolor por la muerte de Jesús a la esperanza en su victoria sobre la muerte. Es un día que prepara el corazón de los fieles para recibir con alegría la Resurrección de Cristo, el acontecimiento central de la fe cristiana.

La Vigilia Pascual

Aunque el Sábado Santo es solemne y silencioso, al anochecer se celebra la Vigilia Pascual, una de las liturgias más importantes del calendario cristiano. Durante esta ceremonia:
• Se bendicen el fuego nuevo y el cirio pascual.
• Se proclama con júbilo la resurrección de Jesucristo.
• Se celebran bautizos en muchas comunidades, dando la bienvenida a nuevos fieles.

En esencia, el Sábado Santo es un día de espera que culmina con la esperanza transformada en alegría durante la madrugada del Domingo de Resurrección, cuando los cristianos celebran que Jesús vive para siempre.