Donald Trump critica sermón de obispa que pidió misericordia para inmigrantes y la comunidad LGBTQ

Donald Trump critica sermón de obispa que pidió misericordia para inmigrantes y la comunidad LGBTQ

Por : La Redacción.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su descontento con el Servicio Nacional de Oración interreligioso celebrado en su honor durante su toma de posesión, calificándolo como “no un buen servicio”. Su reacción vino tras un sermón pronunciado por la obispa Mariann Edgar Budde, quien instó al mandatario a mostrar misericordia hacia los inmigrantes y la comunidad LGBTQ, además de destacar las preocupaciones de quienes temen por su seguridad y derechos.

“Permítame hacer una última súplica, señor presidente: millones han depositado su confianza en usted y, como le dijo a la nación ayer, usted ha sentido la mano providencial de un Dios amoroso. En nombre de nuestro señor, le pido que tenga misericordia de la gente de nuestro país que tiene miedo”, dijo Budde durante su intervención.

La obispa, líder de la Diócesis Episcopal de Washington, subrayó la difícil situación de niños homosexuales, lesbianas y transgénero, muchos de los cuales temen por sus vidas, independientemente de su afiliación política. También hizo un llamado a reconocer la labor de los inmigrantes que trabajan en condiciones arduas y que, aunque carezcan de documentos, contribuyen positivamente a la sociedad estadounidense.

“No son delincuentes; pagan impuestos y son buenos vecinos”, agregó Budde, al referirse a los inmigrantes que desempeñan trabajos esenciales en sectores como la agricultura, la limpieza y la atención médica.

Al ser consultado por los periodistas al regresar a la Casa Blanca, Trump cuestionó la calidad del servicio religioso. “No fue muy emocionante, ¿verdad? No pienso que haya sido un buen servicio, no. Podrían haberlo hecho mucho mejor”, comentó.

El momento generó reacciones diversas. Según testigos, Trump y su vicepresidente intercambiaron miradas y comentarios tras las palabras de Budde, mostrando su desaprobación.

Budde, reconocida por su activismo en temas como la equidad racial, la reforma migratoria y la inclusión LGBTQ, ya había criticado al expresidente en 2020 cuando visitó sin previo aviso la Iglesia Episcopal de San Juan, un sitio histórico frecuentado por presidentes. Aquella visita fue precedida por la dispersión de manifestantes pacíficos con gases lacrimógenos y balas de goma, lo que generó indignación en la comunidad religiosa.

La obispa calificó el mensaje de Trump en esa ocasión como “antitético a las enseñanzas de Jesús”, reforzando su postura crítica hacia las acciones del entonces presidente.